jueves, 18 de diciembre de 2014

Chernobyl... ¿un paraíso?

Nueva camada de lobos en Chernobyl
Nueva camada de lobos en Chernobyl
No sé si todos, pero muchos recordaréis el terrible accidente ocurrido en la central nuclear de Illich Lenin a tan sólo 18 km Chernobyl (actualmente Ucrania) el 26 de Abril de 1986.

Aquello fue un auténtico desastre. Aproximadamente 116.000 personas tuvieron que ser evacuadas de sus casas. Se llegaron a detectar niveles anómalos de radiactividad en hasta 13 países de Europa occidental y oriental.

Un total de 600.000 personas denominadas "liquidadores" se encargaron de descontaminar y contener la radiación procedente del reactor nuclear en un área de unos 30Km de radio conocida como "Zona de Alienación". Gracias a ellos, la catástrofe no llegó a más.

Lobos en libertad en Chernobyl
Lobos en libertad en Chernobyl
Aún hoy en día sigue vigente el perímetro. No sé hasta qué punto está permitido entrar en dicha zona o si simplemente el hecho de haber radiactividad. Tampoco voy a entrar en detalles sobre cómo se actuó o si energía nuclear sí o no... tan sólo os voy a hablar de dos documentales a cerca del espectacular resurgir de la fauna y flora de dicho perímetro.

Hace un tiempo pensaba que aquello no era más que una zona muerta. Un lugar donde no vivía ni crecía nada. De hecho por aquél entonces un frondoso bosque que fue apodado "El bosque rojo" por la tonalidad adquirida tras el suceso.

Veintiocho años después, me alegra saber que aquello no es un valle de la muerte sino un lugar espectacular, lleno de abundante y diversa fauna y flora. Dado que el ser humano ha dejado de vivir en aquel emplazamiento desde entonces, la naturaleza ha hecho de las suyas una vez más y ha tomado el control de la situación. Los animales, generación tras generación, han sido capaces de adaptarse y vivir con normalidad a pesar de tener altísimos niveles de radiación en sus cuerpos.

En el primer documental de orígen francés y procedente del canal Odisea llamado "Chernobyl, ¿una historia natural?" podemos ver cómo toda la cadena trófica se desarrolla con total normalidad.

La mera presencia de depredadores como el lobo (en lo más alto de la pirámide trófica) indica que todas las especies por debajo de él, incluso las que más en contacto están con la contaminación tales como las plantas, roedores, insectos, etc... son capaces de resistir altísimos índices de radiactividad sin apenas verse afectados. Sus cuerpos están adaptados, no tienen más ojos ni más patas ni pelo de kevlar, simplemente han nacido con una mayor resistencia a las mutaciones. Su ADN es capaz de auto-repararse con mucha más facilidad que el de aquellos que no han nacido en tales circunstancias durante tantas generaciones a lo largo de 28 años.

Lo más increíble (y triste a la vez) es que tal vez el mayor enemigo de la naturaleza es algo que ella misma ha creado... el ser humano. Basta con que no estemos para que todo el ecosistema se equilibre de nuevo.

Como curiosidad, comentar que multitud de científicos siguen entrando a diario en dicha zona para investigar cómo evoluciona dicho área y tratar de descubrir y entender mejor los efectos de la radiactividad. De hecho, uno de los científicos que se ven en el documental, se alimenta de cosas que él mismo cultiva en tierra contaminada. Ha conseguido descubrir que ciertas frutos y vegetales están libres de radiactividad y pueden ser comidos con total normalidad. De hecho menciona que en frutos como el melocotón y similares, el único lugar donde se encuentran niveles peligrosos de radiacion es en el hueso.

En fin... un cúmulo de cosas, datos e imagenes que dejan a uno embobado. Naturaleza salvaje por doquier. Edificios reconquistados por animales e incluso hasta engullidos por plantas y árboles. Extensas plantaciones creadas para el cultivo masivo de trigo y similar vuelven a ser lagos, ciénagas, embalses... gracias a la acción de los castores y efectos meteorológicos...

 

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